Uruguay le sienta bien al hockey provincial. Como olvidar el 2008 cuando los seleccionados provinciales masculino y femenino representaron al país y se quedaron con el Sudamericano Aquella conquista fue en la cancha del club Carrasco Polo, mismo lugar en el que 6 años después brilló otra mendocina: Priscila Jardel.
La talentosa jugadora de Los Tordos integró el seleccionado nacional sub 18 que se quedó con la medalla de oro en el torneo Panamericano de la categoría y además consiguió la clasificación para los Juegos Olímpicos de la Juventud, que se van a desarrollar en agosto en la ciudad china de Nainjing.
“Entrar a la cancha con la camiseta de mi país, escuchar el himno y tener a mi familia en la tribuna fue una de las mejores cosas que me pasaron en la vida”, expresó Priscila intentando transmitir las sensaciones que tuvo al jugar con la camiseta argentina.
–Todo deportista sueña con vestir y defender la camiseta nacional, me imagino que vos cumpliste tu sueño.
–Sí, es algo increíble poder defender estos colores. No puedo explicar bien con palabras lo que se siente.
En los Juegos Olímpicos, tal como ocurrió en el Panamericano, los partidos se juegan cinco contra cinco y en tres tiempos de 12 minutos cada uno, sobre este novedoso formato Jardel explicó: “Me costó mucho adaptarme, sobre todo porque se corre mucho más y hay que estar muy bien físicamente, pero me fui adaptando y en la parte técnica me sentí muy bien”.
–Tuviste un gran torneo, ¿te lo esperabas?
–No, nunca me imaginé que iba a ser la goleadora del equipo y a estar a un solo gol de ser la máxima goleadora del campeonato.
–¿Cuál fue la clave para que consiguieran el título?
–El buen grupo que se armó. Todas tiramos para el mismo lado y ninguna se sentía más que otra.
–¿Qué significó tener a Carlos Retegui en el banco de suplentes?
–No lo podíamos creer. Él ganó todo dirigiendo a Las Leonas y que estuviera con nosotros, siguiendo el torneo, fue una motivación extra.
–¿En agosto te ves en los Juegos Olímpicos?
–Voy a dejar todo, como lo vengo haciendo en cada entrenamiento, para poder estar ahí.
Foto: Maximiliano Ríos de Diario UNO