El seleccionado femenino goleó a Chile por 4 a 2 en la final de la Copa Panamericana de Santiago. Es el sexto título consecutivo conseguido por el conjunto albiceleste.
El 50 por ciento del objetivo -más allá de los números, el más importante- había sido obtenido con la victoria en las semifinales. Ese triunfo por 3-0 ante Canadá del jueves les había dado a las Leonas la clasificación para el Mundial de España-Países Bajos 2022.
Pero faltaba completar la tarea. Y contra Chile se logró llenar la otra mitad del vaso. Porque el 4 a 2 frente al local le dio al seleccionado argentino el título de la Copa Panamericana para ratificar su dominio continental absoluto.
Ambos adversarios se habían encontrado en la fase de grupos y la victoria del conjunto conducido por Fernando Ferrara fue más amplia (4-0). Si bien en la definición del torneo el triunfo pareció siempre estar latente por el peso específico de las jugadoras argentinas, las chilenas complicaron en parte y recién en los últimos diez minutos las Leonas pudieron establecer en el resultado las claras diferencias que existen en el juego.
Pareció en realidad que todo sería más sencillo cuando María José Granatto puso el 1-0 con un córner corto. Y ese resultado se mantuvo en el primer tiempo.
Ya en el complemento todo se modificó. A los 4 minutos Denise Krimerman estableció el empate parcial también a través del fijo. Y cinco minutos más tarde Agustina Albertario volvió a poner a las argentinas arriba en el marcador. Pero la alegría no duró mucho y las dudas surgieron cuando a los 18 Krimerman volvió a igualar.
Hasta que en el cierre apareció la jerarquía del subcampeón olímpico, más allá de tener una jugadora menos por la tarjeta amarilla recibida por Cedrés. Fue una ráfaga entre los 23 y los 27 minutos en la que primero Granatto y luego Agustina Gorzelany con el fijo establecieron el resultado final (que pudo ser aún más cómodo por los tres cortos fallados en el último cuarto)para desatar el desahogo.
En definitiva, las Leonas cumplieron con la lógica en el torneo y se llevaron el título con cuatro victorias en cuatro presentaciones, 17 goles a favor y apenas dos en contra (los de Chile en la final).
Ahora habrá tiempo para que Ferrara y las jugadoras sigan conociéndose de cara a lo que vendrá que será la FIH Pro League, torneo en el que Argentina debutará el 12 de febrero frente a Bélgica en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo.
Después, del 1° al 17 de julio en Terrasa y Amsterdam será el momento del Mundial. Pero esa será una historia muy distinta.