Por Christian Sosa
El torneo Apertura 2021 quedará en el recuerdo por varias situaciones. Primero por haber sido el primer certamen post pandemia, luego por haber sido suspendido y después reanudado y finalmente por intentar comprender el reglamento de juego y la aplicación del mismo.
La polémica surge a partir de lo que sucedió tras la disputa de la 11ª y última fecha del campeonato de Damas A donde quedaron definidos los equipos que disputarán la Zona Campeonato y los que jugarán la Zona Promoción.
Para los que luchan por el título se armaron dos zonas de cuatro cada una y con arrastre de puntos entre los equipos que forman parte de mismo grupo.
Los resultados y los números marcan que uno de los clubes de la zona B arranca la segunda ronda con la totalidad de los puntos, que es Liceo con 9 unidades. A su vez, Marista, que integra la misma zona empieza sin unidades y prácticamente sin chances de llegar a semifinales.
Lo curioso y sorprendente es que las Curitas terminaron la fase regular segundas con 21 puntos (detrás de Murialdo por diferencia de goles). Es decir que uno de los mejores equipos puede quedar sin chances ya en la primera jornada de la Zona Campeonato, si es que no consigue la victoria.
Así como los números benefician a uno y perjudican a otro, las reglamentos de juego deben ser bien pensados, analizados y que sean parejos para todos.
Desde hace un tiempo largo que la Asociación Mendocina de Hockey no tiene un formato de torneo único para la disputa de sus torneos locales. Los distintos campeonatos que se han desarrollado en los últimos años, todos han tenido reglas de juego diferentes, que a su vez son difíciles de comprender y de explicar.
Si hay algo por lo que se ha caracterizado el hockey mendocino es por su buena labor en la parte deportiva y también dirigencial y que, en tiempos de pandemia, hayan podido retomar las actividades ya desde al año pasado y hoy poder contar con público en las canchas. En eso Mendoza está varios escalones por encima de otras provincias.
Pero también hay que reconocer una falla importante a la hora de pensar, diagramar y redactar los reglamentos de juegos para los torneos. Que estos sean claros y que se premie el esfuerzo y la dedicación y que no se dependa de la suerte de tal equipo o el resultado de otro, si es que se pretende ser un deporte serio y confiable de cara al futuro inmediato que sería el Clausura 2021.
Así comienza la Zona Campeonato de Damas A
¿El torneo de damas B sin ascensos?
El certamen de la segunda categoría también forma parte de estos reglamentos tan particulares que fiscaliza la AMH. El mismo indica que los cuatro peores equipos del torneo de Damas A más los cuatro primeros del de Damas B jugarán un mini torneo, a cuatro fechas, con arrastre de puntos (dependiendo el certamen que disputó cada uno) y donde los cuatro mejores ubicados formarán parte de elite del hockey en el Clausura.
Hasta ahí todo normal. En la denominada Zona Promoción, lo que no está contemplado es que existe la posibilidad que de los clubes ubicados entre el puesto uno y el cuatro sean justamente los que estaban en la máxima categoría y que el resto continúe jugando el campeonato de la B.
Todo torneo de ascenso, sea cual sea el deporte, categoría o género, debe garantizar al menos que un equipo logre el objetivo de volver a Primera división o jugar por primera vez entre los mejores de Mendoza.
¿Qué sentido tiene disputar un certamen semestral o anual y que no asegure, por lo menos, un cupo en la A?.
Hay tiempo de rever, estudiar y de modificar lo que se está haciendo mal. En pocas semanas más estará comenzando el torneo Clausura y algo tiene que cambiar en el hockey de Mendoza.