Los clásicos se ganan con juego y corazón. Los clásicos se ganan desde el minuto cero y los clásicos se ganan siempre y más si es un mano a mano y no tenes ventaja. Por este motivo Murialdo festejó con todo su victoria ante Andino por 4 a 2.
Es que el superclásico del hockey mendocino, fue para los Canarios, que tenían que ganar o ganar para pasar a las semifinales del Torneo Mendocino y poder enfrentarse con Vistalba.
Y así fue, es que el conjunto que dirige, Sebastián Sánchez, fue superior a los Azules y por este motivo se quedó con el triunfo.
Fue un partidazo el clásico, un encuentro de ida y vuelta, con mucho ritmo y sobre todo se jugó muy limpio.
Murialdo tuvo como máxima figura a Matías Cattaneo, el juvenil del equipo de Villa Nueva, fue clave en la victoria de su equipo, al marcar dos goles y ser una pesadilla para todo la defensa de Andino.
Daba la impresión que la primera etapa iba a terminar igualada, pero una gran jugada individual de Gabriel Herrera, que habilitó a Matías Cattaneo, que con un desvio puso el primero.
En el complemento, en el primer ataque, Murialdo marcó el segundo por medio de Cattaneo.
Luego los Canarios, tuvieron dos situaciones muy claras para aumentar el marcador, por medio de Kevin Torregrosa y Leo Castronovo, pero ninguno pudo aprovechar.
Esto hizo que Andino, se agrandara, y los Azules no dejaron pasar esta oportunidad. Primero consiguieron el descuento por medio de un desvio de Matías Bustos y Seba Ruscio con un corto, marcaba la igualdad.
De ahí en más, Murialdo, tuvo que salir a buscar la victoria, porque el empate le favorecía a los Azules.
Pero en dos jugadas de córner corto, el conjunto de Villa Nueva, consiguió la victoria por medio de dos disparos de Franco Médici.
Así los dirigidos por Seba Sánchez, se metieron en las semifinales y además dejaron a su clásico rival afuera del campeonato.
Nota: Gonzalo Santo Tomas
Foto: Andrés Arequipa