Si no fuera por lo que hizo Lucha Aymar, Cecilia Rognoni sería la mejor jugadora de la historia del hockey argentino.
La ex jugadora del seleccionado nacional hace cinco años que vive en Holanda junto con su esposo y sus dos hijos y en este Mundial es la madrina de Las Leonas, por lo que ayuda a las chicas en todo lo que necesitan.
En un mano a mano con Ovación, la defensora habló de varios temas.
–¿Cómo es la vida de Cecilia Rognoni actualmente?
–Una vida bastante ocupada haciendo lo que me gusta. Estoy muy bien, al igual que mi familia y mis hijos. Además soy entrenadora de hockey y estoy encantada de estar viviendo aquí en Holanda.
–¿Cómo te sentís siendo madrina del seleccionado nacional?
–Feliz, pero me dan ganas de entrar y jugar. No doy más. Pero creo que a cualquiera que vistió alguna vez esta camiseta le gustaría estar ahí adentro.
–¿Te diste cuenta de lo que lograste en tu carrera como jugadora?
–Ahora que pasó mucho tiempo empiezo a valorar lo que hice. Los años que viví en el hockey y los premios que gané. En mi casa tengo las medallas olímpicas y el resto de los premios.
–¿Fuiste muy castigada?
–Fueron momentos muy duros los que tuve que vivir. Yo reconozco que me equivoqué, pero fui la única que se hizo cargo de las cosas que pasaron. No todos aceptaron los errores y muchos se lavaron las manos. Fueron duros y muy injustos conmigo. Al margen de lo que pasó, hoy me encuentro diciendo que hubiera hecho otras cosas con las chicas, como por ejemplo haber compartido más momentos con ellas.
–¿Te gusta que todos digan que siempre quieren tener una Rognoni en su equipo?
–Sí, ahora lo estoy valorando más y lo tomo como un mimo.
–¿Te molesta la gente falsa?
–Sí, y chocan mucho conmigo. Yo tomo más el mensaje que la forma en que se dicen las cosas y en la Argentina muchas veces es todo lo contrario. Yo respeto todo, pero a mí en su momento nadie me respetó. Gracias a Dios ya lo superé y ahora veo todo lo que hice para mi país.
–¿Qué sentís cuando Piti D’Elía dice que sos su ídola?
–Yo sé que me admira mucho, pero ella es ella. No está bueno que la comparen conmigo. Hay cosas que veo y le digo ‘Piti, no hagás esto’, pero vos viste cómo es ella.
–¿Le das consejos?
–Sí, pero no tanto consejos. Hablamos y me gusta que ella esté bien y disfrute de todo lo que está haciendo.
–Ella destaca siempre el día en el que no tenía dónde dormir y vos le diste un lugar.
–Yo soy una agradecida de haber vivido a 10 cuadras del CENARD y valoro lo que hicieron y siguen haciendo las chicas del interior. Yo no sé si hubiera jugado en el seleccionado en esas condiciones. No puedo creer el esfuerzo que hacen.
–¿Te gustaría ser entrenadora de Las Leonas?
(Hace un silencio) –No sé cómo va a seguir mi carrera, pero Las Leonas son parte de mi vida.
