Las madres Leonas

Las madres Leonas

No solo comparten la habitación y las charlas antes de irse a dormir. Las dos tienen en su mesa de luz fotos de su hijos, Santiago y Juan Bautista. Belén Succi y Mariana  Rossi son leonas dentro y fuera de la cancha. La arquera y la defensora tienen la particularidad de ser las  únicas madres que tiene el seleccionado nacional en el Mundial de La Haya.

Tanto Belén como Mariana, ya saben lo que es ganar un título mundial, las dos es tuvieron en Rosario 2010, y disfrutan de la posibilidad de estar otra vez en la máxima cita del hockey internacional.

 

–¿Cómo es estar lejos de sus hijos?
Belén Succi: –Yo me estoy aguantando un poco más, porque Bauti llega el 7 de junio, pero por suerte
hablamos mucho con Mariana y los días se van pasando rápido. Igual ellos saben que estamos en un Mundial y hay muchos estrés.

 

Mariana Rossi: –Distinto a Goofy (así le dicen a Belén), Santi llegó ayer con mi esposo y hoy (por ayer) tenemos el día libre, así que me voy a ir a estar con ellos un par de horas así me reconoce un poco más, porque cuando llegó no me daba mucha bola.

 

–¿Qué sienten cuando están en la habitación y ven las fotos de sus hijos?
BS: –Es algo hermoso. Nunca pensé que iba a estar jugando un Mundial con un hijo mirando desde la  tribuna.

 

Me encantaría que estuviera conmigo. Ayer le dije a Donna (así le dicen a Mariana) que me prestara a Santiago un ratito así le doy unos besos. Tenía la necesidad de abrazar a un bebé.

Acá es distinto porque no tenemos que cocinar y podemos dormir más, algo que hace mucho que no me pasa.

–¿Luego de ser mamá, pensaron que iban a tener otra vez la oportunidad de jugar un Mundial?
MR: –La verdad que no. Yo no quería seguir jugando al hockey a nivel internacional porque demanda  mucho tiempo. Mi situación es diferente,  cuando me llamaron otra vez no había tantos entrenamientos y lo hablé  con mi familia, porque quedaban solo dos meses, y ellos me apoyaron.

 

No solamente yo tuve que acomodar los horarios, si no que también mi marido y mis hermanas. Todos de alguna otra forma me ayudaron para que pueda estar acá.

 

BS: –Yo no quería volver a jugar por un problema personal. Gracias a Dios que volví a tener ganas y mi hijo es un cable a tierra. Es muy bueno saber que mi bebé se queda con el padre y con sus cuatro abuelos.

 

–Hablan con las chicas de esto de ser madre y jugadora al mismo tiempo, porque ustedes hacen un
esfuerzo diferente al resto…

MR: –No sé si es diferente al resto. Yo me pregunto cómo hago para ir a entrenar más de 8 horas y volver a jugar con Santi, hacerle la comida y disfrutarlo. Creo que cuando uno está bien, el cuerpo responde de otra forma.

 

BS: –Es un amor tan grande que no te das cuenta de que estás cansada. A mí me pasa que son las 3 de la mañana, se despierta y cuando veo el reloj me da bronca, pero cuando lo miro, se me va todo. Ellos te ayudan para seguir adelante.

 

–¿Salen a escondidas de su casa  para que los chicos no lloren?
MR: –¡No! Yo soy muy cruel. Le digo: “Santi, mamá se va a entrenar o viaja al Mundial’. No me gusta mentirle.

Le explico a donde me voy y cada viaje va entendiendo. Antes lloraba y ahora no me da bola.

 

–¿Cuando llegan de los viajes las esperan a ustedes o a los regalos?
BS: –Siempre en el aeropuerto le  compro algo. No sé si está bueno, pero es la forma de empezar a interactuar con él cuando vuelvo.

 

MR: –Yo a Santi lo compro con la comida y con eso para él soy la mejor mamá del mundo.

 

–¿Cuánto influyen sus parejas para que ustedes puedan estar acá?
BS: –Sin él no podría. Saber que llega de trabajar y se preocupa por ver  si esta todo en orden no tiene precio. El hockey es una parte de nuestra vida.

 

MR: –Somos un equipo. Mi marido fue el que me metió fichas para que volviera y me hizo ver las cosas importantes por las que tenía que estar acá.

 

–Hablando de hockey. Se siente un gran clima en el equipo. ¿Qué diferencia hay con el 2010?
BS: –Que estamos en Holanda y no aguantamos más el color naranja.

 

MR: –Nosotras vinimos a  defender el título y a llevar otro para la Argentina.

Artículos similares

Comentar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *